En este libro se explican las consecuencias que para Madrid y su entorno agrario tuvo el asentamiento permanente de una de las Cortes absolutistas más poderosas de la Europa moderna, las cuales condujeron, inexorablemente, a un afianzamiento de los estamentos privilegiados y a una degradación de las condiciones de vida de las clases populares, todo lo cual desencadenó importantes conflictos sociales en el centro neurálgico del Imperio español y los distritos rurales más próximos. Este estudio constituye un magnífico ejemplo de la interacción existente entre las economías urbana y rural en la Edad Moderna. A la vez, los cambios acaecidos durante esta época no sólo permiten establecer los límites impuestos al desarrollo del capitalismo en Castilla desde la órbita del Estado absolutista, su clase dominante y los grupos subalternos, sino también rastrear los orígenes de numerosos problemas que aún siguen teniendo plena vigencia en Madrid y su área metropolitana.José Miguel López García es profesor titular del Departamento de Historia Moderna de la Universidad Autónoma de Madrid. Desde hace una década dirige el Equipo Madrid de Estudios Históricos, grupo integrado por una quincena de jóvenes investigadores vinculados a la citada institución académica, que llevan doce años realizando trabajos sobre la Historia de Madrid y su territorio, con la convicción de que es posible superar localismos y hacer obras críticas que permitan comprender mejor nuestra realidad actual. Entre ellas destaca Carlos III, Madrid y la Ilustración, publicada por esta misma editorial.en 1988.
