Decir filosofÃa es para Gabriel Albiac decir un juego, una feliz indolencia o una melancolÃa sabia y escéptica. También es soledad y, a veces, casi lo único que puede darnos compañÃa. Su Elogio de la filosofÃa emprende un viaje fascinante y muy personal por las preguntas fundamentales que nos hemos hecho siempre.Sus páginas nos hablan de la existencia y su sentido, el tiempo y la muerte, la libertad, la belleza o la verdad en un estilo único, lÃrico y culto, preñado de referencias literarias y artÃsticas. En sus páginas desfilan las palabras y las ideas de la sabidurÃa clásica en Heráclito, Platón o Marco Aurelio; de San Pablo y la Biblia; de La Boétie, Montaigne, Pascal o Spinoza; de poetas como Quevedo, John Keats o W. H. Auden; y obras como La IlÃada o el Cristo de Grünewald.En esta travesÃa no hay programa ni decálogo alguno, no hay respuestas cerradas, tan solo un bello «consuelo de la huida» y una «lucha por conocer» que nos acerca a eso que llamamos libertad.