Tras siete años de ausencia por haber cometido un asesinato, Albert Wikes regresa a Homewood, gueto negro cuya personalidad, con el paso del tiempo, va desvaneciéndose. De esta decadencia -que consiste sobre todo en una disolución progresiva de los rasgos y la identidad del barrio- se escapan, aunque brevemente, Wilkes y su amigo John French: el uno, excepcional pianista y el otro, todo un carácter. Con el tiempo, Carl, hijo de French, junto con su amigo Tate -un negro albino que raya en lo sobrenatural- y la novia de ambos, Lucy, serán los encargados de restablecer las tradiciones de Homewood y recuperar la difusa herencia de la generación anterior. "Homewood blues" es una saga en la que los personajes aparecen y desaparecen, recorriendo la piel y la sangre de una comunidad negra entre los años de la Depresión y e regreso de Vietnam. Una comunidad abandonada a su música, a la música que con ritmo de blues, reproduce en su prosa John Edgar Wideman.
